lunes, 27 de enero de 2014

Al gusto del espectador

Así es la interpretación que damos al llanto del bebé, la más recurrente "tiene cólico" que acá de este lado hace alusión a un retortijón o dolor de panza, aclaro porque he leído que en otros países tiene diferentes significados. Luego de una salida corriendo a urgencias en medio de la noche y un domingo molestando a la pediatra que nos confirmaron que el bebé no tenía ningun problema de salud y explicarnos como los bebés al inicio pasan muchos periodos irritados y llorando sin causa aparente, nos tranquilizamos un poco, pero la verdad esque eso de ser primerizos y que el bebé esté llorando a gritos no es muy buena combinación, aparte los que rodean presionan demasiado con sus diagnósticos y remedios.  Que si dale un té, que si sóbale la panza con bicarbonato o peor aún dale bicarbonato! (núnca le den bicarbonato a un bebé es muy peligroso). Seguimos indagando un poco y dimos con una tablita que aquí nos funcionó a las mil maravillas y nos ayudó a ir conociendo a nuestro bebé, la imprimimos y la pegamos en el tocador de la recámara para no entrar en pánico y poco a poco de hacerlo un poco atinándole un poco al azar fuimos reconociendo cada vez mas lo que necesitaba Dante, la comparto con gusto ojalá a alguien le sea de utilidad:

INSTRUCCIONES PARA TRATAR EL CÓLICO, SEGÚN TAUBMAN
Pediatrics, 1984;74:998
1. Intente no dejar núnca llorar a su bebé
2. Para descubrir porque llora su hijo, tenga en cuenta las siguientes posibilidades:
a)el bebé tiene hambre y quiere comer
b)el bebé quiere chupar, aunque no tenga hambre
c)el bebé quiere que le tomen en brazos
d)el bebé está aburrido y quiere estimulación
e)el bebé está cansado y quiere dormir
3.Si sigue llorando durante más de 5 minutos con una respuesta, pruebe con otra.
4.Decida usted misma en que órden probar las anteriores opciones
5.No tenga miedo de sobrealimentar a su hijo, eso no va a ocurrir
6.No tenga miedo de malcriar a su hijo, eso tampoco va a ocurrir

También luego leí no recuerdo ni donde, que los bebés hasta los 3 meses lloran mucho por una especie de adaptación que tienen a su nuevo ambiente, según yo lo comprobé porque me fijé que a Dante le asustaba mucho el cambio de pañal, bostezar y la risa de la gente, todo eso lo hacía llorar y conforme fue creciendo ya no.